Valdés pidió a los funcionarios nacionales que «se hagan cargo del Gobierno que nos prometieron»
Funcionarios del Gobierno y directivos de 41 entidades de medicina prepaga llegaron finalmente a un acuerdo en la madrugada de ayer, referido al reintegro de dinero a los afiliados y a los incrementos que tendrán en adelante las cuotas de los planes de salud. Al pacto se llegó tras unas 15 horas de deliberaciones, que se llevaron a cabo como parte de una audiencia a la cual había citado el juez a cargo de la causa presentada en abril por la Superintendencia de Servicios de Salud, Juan Rafael Stinco, por supuesta cartelización para la fijación de precios en el sector.
Según el acta firmada desde ambas partes, a partir de julio las entidades devolverán, en un plazo de 12 meses, lo cobrado entre enero y mayo en concepto de incremento, que se haya excedido del índice de inflación de cada mes previo. Las 12 cuotas en las que se hará ese reintegro serán mensuales y consecutivas y se ajustarán según la tasa pasiva del Banco Nación.
Se tratará de un mecanismo por el cual durante un año se descontarán montos en las facturas. La particularidad es que ello ocurrirá a partir del mismo mes en que las prepagas volverán a quedar liberadas de reglas para definir los incrementos de las cuotas. Por eso, el efecto podría quedar relativizado o incluso neutralizado.
Para calcular el monto que deberá ser contabilizado a favor de los asociados, por cada período se considerará cuál fue la inflación del mes previo y se calculará la cuota que hubiera resultado de aplicársele a la del período inmediato anterior ese índice para determinar el reajuste.